¿Qué son los fidgets?

Fidgets, en inglés, quiere decir ¨agitarse¨, ¨moverse mucho¨, algo así como estar inquieto…

Se tratan de juguetes antiestrés con un fin terapéutico, pensados para autorregular el estrés y ansiedad tanto en niños como adultos con hiperactividad o TDAH, déficit de atención, problemas de concentración, autismo, etc.

¡Sin embargo, pueden ser útiles para todos!

¿Para qué utilizamos los fidgets?
Los movimientos repetitivos y sistemáticos de piernas, morderse las uñas, hacer clickear un bolígrafo, etc., son acciones que solo ponen de manifiesto nuestras necesidades de movimiento ya sea para desestresarnos o incluso concentrarnos más para realizar una tarea.

Se utilizan en casa, el colegio o en terapias, ayudando a focalizar la atención y proporcionando un escape motor a los deseos de movimientos y tensiones.

Tienen la ventaja de ser de pequeño tamaño, fáciles de llevar en la mochila o en el bolsillo, sin que los demás se den cuenta que se trata de un recurso terapéutico.

¿Qué tipos de fidgets existen?
Según la forma de canalizar el estrés, y la necesidad de movimiento/ acción que contemple tenemos diferentes tipos de fidgets:

• Propioceptivos para necesidades de presión.

• Táctiles para una estimulación sensorial táctil.

• Vestibulares para regular la necesidad de movimiento.

• Orales ideales para masticar y/o morder.
  Los fidgets siempre deben adaptarse y ajustarse a los intereses y necesidades del niño y no meramente al objeto de moda…