Cada vez están ganando más terreno los juguetes lentos, en sintonía con un estilo de vida sin prisas.
Promueven la imaginación, el aprendizaje y el papel activo de niñas y niños, siendo los protagonistas y guías del juego.
¿Qué son los juguetes Juguetes lentos o slow toys?
Se trata de juguetes reales, sin baterías, que no emiten sonidos ni movimientos automáticos, y amigables con el medio ambiente.
Además al estar fabricados por materiales nobles son más durables, siendo por lo general esos juguetes que se transmiten de generación en generación…
¿A quién no le pasó de gastar un dineral en juguetes última moda y que al cabo de unos días quedará olvidado en un rincón o peor aún se rompiera luego de un rato de uso?
Eso es porque los juguetes automáticos, que hacen todo por sí mismos, no sólo no son estimulantes a largo plazo para el juego activo de los niños al ser espectadores pasivos, tampoco divierten por mucho tiempo ni tienen un fin educativo. También convierten a los niños en espectadores pasivos de sus funciones, no son estimulantes, divertidos y tampoco educativos.
Movimiento «Juguetes lentos».
Thierry Bourret, un distribuidor de juguetes francés, fundó en 2011 la distribuidora de «juguetes lentos» Asobi e inició una campaña en pro de concientizar sobre la importancia de ese tipo de juguetes, más allá de las modas.
¿Qué características tienen este tipo de juguetes?
- Estimulan la imaginación, el juego libre y la creatividad.
- Son adaptativos: dan a los niños y niñas la libertad de desarrollarse a su ritmo.
- No requieren de pilas ni baterías.
- Son juguetes para tocar y manipular.
- No deben estar construidos en su mayoría de plástico, principalmente están fabricados de materiales naturales como tela o madera.
- Tienen que ser de buena calidad, obteniendo las licencias y permisos necesarios para su comercialización.
- Deben ser perdurables, resistir el paso del tiempo y ser atemporales es decir no pasar de moda. Esto les permite adaptarse a todas las etapas de crecimiento del niño.
- Tienen una función lúdica (para jugar y disfrutar), una función educativa y activa en el desarrollo del niño y de la niña.
- Son productos amigables con el medio ambiente.
- Debe existir una buena relación calidad-precio, con el objetivo de ser accesibles a todos.